keyboard_arrow_up
keyboard_arrow_down
keyboard_arrow_left
keyboard_arrow_right
0%
07/09/2021

Consecuencias del excesivo uso de pantallas en niñas y niños y cómo lidiar con ello como tutores

Desde hace un tiempo y, con mayor énfasis en los últimos meses, internet se ha convertido en una herramienta esencial en la vida de estudiantes y trabajadora/es de todo el mundo.

Si bien las ventajas del internet han cambiado de manera positiva la vida de los seres humanos, también son muchas las desventajas que se han ido sumando a la lista de problemas que trae consigo la era digital, especialmente los que afectan a niñas, niños y jóvenes. ¿Cuáles son los daños de este uso excesivo de tecnología y cómo podemos ayudar a mejorar esta situación en nuestros hogares?

Consecuencias en el desarrollo cognitivo

 

En uno de sus más recientes libros, el neurocientífico Michel Desmurget advierte que “Los ‘nativos digitales’ son los primeros niños con un coeficiente intelectual más bajo que sus padres”, indicando que “el tiempo que se pasa ante una pantalla por motivos recreativos retrasa la maduración anatómica y funcional del cerebro”. Esto se debería a que importantes aspectos de la inteligencia se verían atrofiados: el lenguaje, la concentración, la memoria y la cultura.

Del mismo modo lo advierte un estudio realizado por la Universidad de Calgary, el que indica que una alta exposición a pantallas podría provocar en niñas y niños “deficiencias y retrasos en el desarrollo del lenguaje, la comunicación, las habilidades motoras y/o la salud socioemocional”.

La interacción sensorial intrafamiliar es esencial para la estimulación del desarrollo del lenguaje y el desarrollo emocional de niñas y niños, lo que se vería altamente mermado al ser reemplazado por una pantalla. Además de este aspecto tan importante para el desarrollo de cualquier niña/o, otras problemáticas que se pueden presentar son “la disminución del tiempo dedicado a otras actividades más enriquecedoras (tareas, música, arte, lectura, etc.); interrupción del sueño, sobreestimulación de la atención, lo que provoca trastornos de concentración, aprendizaje e impulsividad; subestimulación intelectual, que impide que el cerebro despliegue todo su potencial; y un estilo de vida sedentario excesivo que, además del desarrollo corporal, influye en la maduración cerebral” (BBC).

Es por esta razón que el acercamiento y comunicación entre padres, madres e hija/os es tan importante, especialmente en la primera etapa de la vida. Daniela Henríquez, experta en redes sociales y cofundadora de la ONG Efecto Mariposa (organización que promueve, asesora y educa sobre convivencia escolar, laboral y digital) indica que “La etapa primaria de la vida tiene que ver con la interacción: con el tocar, con el oler, con el saborear, con el mirar y la pantalla te limita todo eso”. Además, agrega que “la primera etapa de la vida tiene que ser 100% acompañada y regulada. Es importante que los papás y las personas sepan sobre el daño que se genera con la exposición a las pantallas, el que en algunos casos puede llegar a ser irreversible” (La Tercera).

Es innegable que el uso de la tecnología ha sido un analgésico para madres y padres que, ante la presencia de niñas y niños aburridos, optan por la pantalla como único medio de entretenimiento que les permite obtener tiempo para ocupar en otras tareas. Sin embargo, el uso indiscriminado de esta, más una nula supervisión por parte de los tutores, expone a los infantes a otros peligros de los cuales muchas veces los adultos no son del todo conscientes.

Internet, el elefante invisible

 

Así como internet abre un mundo de posibilidades y oportunidades, también ofrece múltiples riesgos, especialmente para niñas y niños.

Según los resultados de la encuesta Radiografía Digital 2019, realizada a niñas y niños entre 4° y 7° básico, un 86% de estos declara tener un celular propio. De estos últimos, un 96% señala Youtube como su red social favorita, un 85% utiliza Whatsapp, mientras que un 54% prefiere Instagram. Por otra parte, un 49% de los entrevistados indican que dedican la mayor parte de su tiempo libre jugando en su celular y/o consola, el 47% prefiere pasar tiempo con su familia y ver videos en Youtube, un 33% prefiere visitar Redes Sociales, y un 32% elige escuchar música.

A las altas cifras de uso de internet y redes sociales en niñas y niños se suma el alarmante hecho de que una gran cantidad de estos confiesa haber encontrado contenido inadecuado, falso o grosero alguna vez navegando (38%); además, un 28% declara que ha visto cómo le hacen Ciberbullying a otros en la web.

Además del cyberbullying, niñas, niños y jóvenes están expuestos a delitos cibernéticos debido a la alta exposición que algunos presentan en la web. Para los “nativos digitales” el entorno virtual representa un lugar social donde son incógnitos, por lo que muchas veces utilizan la web como un diario personal, compartiendo información privada y valiosa que podría ser mal utilizada por otros usuarios.

Por otra parte, según un estudio realizado por VTR y el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, un 54% de niñas, niños y jóvenes reconoce haber jugado en línea con un desconocido, lo que resulta particularmente peligroso si se considera que la red es un espacio que promueve el anonimato y con ello, el acoso virtual, la suplantación de identidad o la participación de personas que buscan ganar la confianza de menores para cometer distintos tipos de abuso, entre ellos el abuso sexual infantil.

Sin embargo, no podemos prescindir de algo que tantos beneficios y alegrías nos trae a la vez, por lo que para evitar cualquiera de los hechos anteriormente mencionados, te compartimos algunos consejos para promover un uso saludable y seguro de las pantallas en niñas y niños:

  • Es importante que se les indique que la actividad tendrá un fin, estableciendo desde un principio cuánto tiempo se va a utilizar el aparato electrónico.
  • El contenido consumido por el infante debe ser siempre supervisado por un adulto.
  • Se debe configurar el teléfono con restricciones de contenido y privacidad, sin acceso a la compra de aplicaciones y evitando contenido explícito y con ciertas clasificaciones.
  • Promover el uso de aplicaciones o juegos que potencien la concentración, el pensar, y/o que refuercen sus conocimientos.
  • Considerar una distancia mínima de 40 centímetros entre los ojos y el dispositivo electrónico, y evitar que exista luz directa a la cara.
  • La televisión también es una pantalla que se debe considerar como tal (no solo el celular o el computador).
  • El límite de tiempo en la pantalla no debe exceder los 40 minutos hasta los 7 años.
  • Utilizar aplicaciones que filtren la luz azul.
  • No permitir el uso de pantallas más allá de las 18 horas (para no afectar el ciclo del sueño) ni tampoco que se utilicen en la habitación.

¿Tu hija/o utilkiza TikTok? ¡Mira este video sobre control parental en la plataforma social más popular del último año!